jueves, 7 de agosto de 2014

EXTRACTO HOMILIA EXCMO. Y RVDMO. SR. DR. D. ADOLFO GONZÁLEZ MONTES EL 20 DE JULIO DE 2014


"(...) Y esa experiencia de la acción de la Madre de Cristo y Madre de la Iglesia en la historia de la Salvación, en nuestra historia, es la que nos ha permitido contemplarla en su advocación del Monte Carmelo como verdadera abogada de gracia y salvación.
Nosotros vamos a celebrar, en este domingo que sigue a la fiesta de Nuestra Señora del Carmen de Santa María del Monte Carmelo, esta procesión de alabanzas, al concluir la celebración eucarística de la liturgia de este domingo XVI del tiempo ordinario del año; pero es que Ella está espiritualmente en medio de la iglesia siempre y, por eso, como abogada de gracia y de salvación es la que gobierna nuestras vidas, porque como Madre de todos y de cada uno tiene realmente la condición de Reina de nuestros corazones, por eso, con alegría os disponéis queridos cofrades, os disponéis hoy de una manera especial,  lo venís haciendo a lo largo de estos meses últimos, ya es un largo periodo de tiempo a celebrar el año que viene y así lo anuncio solemnemente la coronación de la Santísima Imagen de la Virgen María del Carmen de Huertas, para el treinta de mayo. Un año, mis queridos cofrades, mis queridos feligreses de esta amada parroquia de San Sebastián, que es jubilar, en el que la gracia de la indulgencia es una manifestación más sacramental  de la misericordia de Dios, que a través del poder de las llaves que entregó Cristo a Pedro y a los apóstoles ejercitaremos generosamente para conmemorar el quinto centenario de esa mujer excepcional que es Teresa de Jesús, reformadora del Carmelo, mística singular, maestra de letras, que realmente ocupa en la historia de nuestra patria, de nuestras letras un lugar absolutamente singular; lo mismo que ocupa un lugar singular en la cima de las experiencias místicas. Creo que es un año absolutamente providencial para que llevemos a cabo esta Coronación de la Santa María del Carmen de Huertas, que realmente ella amó como miembro y reformadora de la orden de Santa María del Monte Carmelo de una manera singular. Sobre todo porque Teresa de Jesús entendió y lo entendió siempre así, que la clave de nuestro encuentro con Dios está en Cristo a través de su humanidad. Teresa de Jesús es, en este sentido, predicadora, heraldo, de la humanidad de Cristo, de cómo en la humanidad del Señor y en los misterios de su carne y sangre se revela su misma divinidad y contempló así al verbo Encarnado siempre en la figura de Cristo a su lado y se entendió así misma como esposa virginal del esposo de la Iglesia, del esposo de las almas de todos y cada uno de los bautizados de lo que alcanza en las vírgenes consagradas en virtud de su consagración en la Iglesia una expresión absolutamente singular. Por eso, la vida consagrada femenina tiene un importante futuro en la iglesia a pesar de la crisis que está padeciendo, están surgiendo nuevas comunidades de vida consagrada femeninas, nuevos estilos del carisma religioso, quiera el Señor que con su Gracia podamos renovar las comunidades históricas pero la consagración de vida de la mujer en la Iglesia no nos faltará nunca porque enriquece y embellece a la esposa de Cristo que es la Iglesia llevando al límite en la vida personal de las mujeres consagradas, aquello mismo que identifica a la Iglesia como esposo de Cristo, la total entrega a su Esposo y Señor.

En este año, pues, jubilar realizaremos la coronación de la Santísima Virgen, la coronación de su imagen, porque Ella reina coronada en los cielos junto al Hijo. En las cuentas del Rosario en ese quinto misterio de los misterios gloriosos, una y otra vez reiteramos, la Coronación de la Santísima Virgen junto al Hijo Reina en los cielos. Reina y Señora del universo, Reina en nuestro corazón siempre pues como hijos la amamos la veneramos y la queremos ensalzar de esta forma en que a través de la figura de las imágenes que veneramos, sabiendo que evocan la realidad, que es la que pretendemos alcanzar, la realidad del cielo, pues siempre que evocando ese misterio celestial, reciben ese culto justo y equilibrado que no debe nunca perder la figura, que debe mantenerse siempre a la luz del dogma cristiano(...) porque todo lo que María es lo es en virtud de ser la Madre de Cristo Nuestro Señor (...)

Lo que falta para el próximo 30 de mayo próximo, con la gracia de Dios lo viváis queridos cofrades, queridos feligreses de una manera muy especial renovando vuestra devoción mariana, siguiendo el índice de María "id y hacer lo que Él diga" para que en verdad nos convirtamos cumplidores de los mandamientos y gobernados por la sabiduría divina ejercitemos en nosotros la misericordia y el perdón y lleguemos así a ser imitadores de Dios. Que así sea."